En el comentario de esta semana el tema era libre, cada uno podía elegir el tema que más le interese y yo he elegido un artículo del libro El Barrio editado en el año 2008. El artículo se llama Mi pasado huele a jaramagos y ha sido escrito por Carmen Bonillo Basilio.
En él se cuenta algunos recuerdos de la vida de Carmen y de su infancia. Todo comienza por su padre, era guardia civil pero diferente a los de hoy en día, junto con sus compañeros se dedicaba a rastrear los campos en busca de salteadores hambrientos al igual que ellos. Su padre aceptó un pabellón al que mudarse junto con su familia, era nuestro actual instituto, allí su padre conoció a unos hombres con los que estableció una amistad y que le aportaron una mayor higiene en sus estancias, allí nació Carmen. Recuerda también cuando iba con su madre a por agua y ella iba a unas haciendas a comer ciruelas y dice que no olvida su olor. Más tarde se tuvieron que trasladar a otro cuartel, echaba de menos el patio de columnas del antiguo patio y pasados algunos años volvió a su pabellón pero esta vez convertido en un centro de educación, en el que ella hizo algunos de sus estudios. Por otro lado recuerda el viento característico de Medina, cuando oye a la gente criticarle ella sólo piensa que se crió en un pueblo en el cual el viento era dueño de las calles y a ella le gustaba la forma en la que el viento le sacudía y alisaba el pelo.
Al leer el artículo me doy cuenta de que es imposible olvidar las cosas que en nuestra infancia han sido importantes para nosotros por ejemplo en el caso de las ciruelas pese a todo el tiempo que ha pasado ella no olvida el característico olor de las ciruelas que cuando pequeña comía, por otro lado yo creo que su infancia tuvo que ser dura ya que eran tiempos difíciles de hambre, poca higiene…pero ella todo lo que tiene son palabras buenas para describir su infancia porque ella fue muy feliz con sus padres y hermanos.
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