lunes, 11 de abril de 2011

Excursión

Me ha encantado.
Puede que no sea una buena frase para empezar un comentario, pero la excursión mereció la pena.
Al principio, antes de ir a la excursión pensé que sería un rollazo, que nos aburriríamos pero al final, fue totalmente diferente a lo que pensé.
Llegamos allí a Prado del Rey, y al final, no vino la policía a escoltarnos como nos dijeron…. A mí me hacía mucha ilusión que nos escoltaran, pero bueno, no pudo ser.
Cuando llegamos al teatro, había otros institutos, nos dieron unas pegatinas con nuestros nombres, y un pañuelo que era como una especie de “señal” para referirse por así decirlo lo que estábamos haciendo allí.
Los profesores nos decían y nos repetían que nos relacionáramos con los demás colegios, pero no lo hicimos.

Cuando entramos dentro del teatro, al principio fue un poco pesado, para empezar las presentaciones, estaban mal hechas, por lo menos para ,mi gusto, tenían muchas letras, y era todo leído, y como me han enseñado a mí, en las presentaciones solo se pone una o dos frases que más o menos resuma el texto.
Pero vamos todo del principio no fue malo, me gustaron mucho las poesías.

Y llegó el descanso.
Nos fuimos dos o tres compañeras de clase a desayunar. Nos pusimos al lado de gente de otro instituto pero ni nos hablaron.

Luego tuvimos que ir otra vez al teatro, y nos tocó a nosotros. Al final no me dio tanta vergüenza como me esperaba. El video la verdad me encantó verlo, aunque ya lo había visto antes. Luego la verdad que no fue tan aburrido como la primera parte.

Y llegó el segundo descanso.
Las dos o tres compañeras de antes y yo, andamos bastante para comprar una lata de refresco que estuviera fresquito, porque allí hacía mucho calor. Pero bueno, mereció la pena andar, así vimos un poco el pueblo, que la verdad, se parece mucho a medina por las cuestas.

Y por último, fuimos otra vez al teatro. Esta parte me encantó. Me encantó el chaval que cantaba, y también el teatro. El teatro fue lo que más me gusto. La verdad que me faltó poco para llorar.
Aquí en la última parte, fue cuando me relacioné con alguien. Era un chaval de mi edad, que estaba sentado detrás de mí, que empezó con broma, mandándonos a callar a mi compañera y a mi. Era de Prado del Rey, no sé como se llama. Pero la verdad que él y sus compañeros eran muy simpáticos. Me llamaban Inés, no sé porque, sería el primer nombre que se les ocurriría. Le dije que me llamaba Rocío, pero no me creyeron. Le dije que era de Medina Sidonia, pero tampoco me creyeron. Pero bueno, estuvimos hablando, y me cayeron muy bien.

La verdad es que ojala el año que viene repitamos la excursión, porque yo, no me arrepiento de ir.
Hasta entonces, solo toca esperar, a averiguar, cual es la siguiente idea de hacer algo así, diferente de Miguel.

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